ChiSpa
Cuando llega el fin de verano y desaparecen los últimos matices del moreno estival, descubrimos que no todo era bronceado. Y es que el no haber sido suficientemente precavidos con las exposiciones solares tiene a veces como consecuencia, la irritación, ladad, posibles quemaduras y rojeces. El tratamiento facial de ChiSpa esta compuesto a base de una mascarilla 100% de aloe vera, potente, y sobre todo eficaz, que aporta todo lo que una piel sana necesita para revitalizar el cutis, resaltar su belleza y sentirse bien.
En el proceso de aplicación del tratamiento se utiliza un cóctel de nutrientes crono-energizantes, esencias de plantas, extractos marinos; que limpia, pule, vaporiza, hidrata y estimula la piel, dejándola con un complejo equilibrado, revitalizado y restaurado.
Una de las claves de este facial es una limpieza en profundidad con una limpiadora prescrita según el tipo de la piel, que trabaja en sinergia con la piel para limpiar, y a la vez armoniza el tono, proporcionando luminosidad, vitalidad y salud.
A continuación, se aplica el Radiance Peel, un peeling de frescas enzimas frutales, de miel de manuka y de aceite de argan para deshacer las células muertas, y para ayudar la renovación celular e iluminar el complejo. Se deja la piel sedosa como nunca.
Para recuperar, calmar y eliminar cualquier rojez, se aplica una maravillosa y única mascarilla de aloe vera y aceite de pepino, y se realiza un masaje con piedras, que estimulan, tonifican y proporcionan un efecto lifting. El aloe vera tiene un componente fuerte anti-inflamatorio y protege contra daños oxidativos, resultando altamente beneficioso para la piel. Rebaja la intensidad de la pigmentación y promociona la penetración elevada de las sustancias que se aplican en la piel.
El siguiente paso del tratamiento ChiSpa, es el masaje linfático y de acu-presión que elimina toxinas, revitaliza la piel para proporcionar una luminosidad radiante. A través de una metodología muy estudiada, la técnica de este masaje mejora la elasticidad y el tono muscular, y pos supuesto es suave para no irritar a la piel.
La mascarilla final es verdaderamente especial. Se aplica un soufflé biodinámica que proporciona una intensa hidratación y reparación. Su rosa de damasco, la reina de todos los aceites, calma, hidrata, nutre la piel dañada por la exposición solar, dejando un cutis sano y radiante.
